A la hora de cuidar tus piernas, puedes hacer varias cosas en tu casa ¡Mira de qué hablamos!
Exfolia: al menos una vez a la semana, esto favorece a la depilación porque evita que se queden los pelos enquistados.
Hidrata: hazlo a diario y siempre después de la ducha, con las piernas bien secas, para favorecer la elasticidad de tu piel. Usa una crema anticelulítica para alisar la piel naranja y luchar contra la grasa localizada.
¡Usa protector solar! Siempre debes aplicar una crema fotoprotectora para enfrentar los rayos del sol. No hablamos de las vacaciones, sino en el día a día, para evitar quemaduras.
¡Ejercicio y alimentación! Practica ejercicio a diario, así sea de baja intensidad como caminatas, bicicleta o subiendo y bajando escaleras. Y por supuesto, apuesta por una alimentación saludable que, entre otros detalles, elimine el consumo excesivo de sal que provoca retención de líquidos.
