El cantante R. Kelly regresó a una cárcel federal en el centro de Chicago antes de su juicio por cargos de pornografía infantil y obstrucción de la justicia, apenas dos semanas después de que lo sentenciaran a 30 años de prisión en Nueva York por crimen organizado y tráfico sexual.
El otrora astro del R&B, de 55 años, fue transferido el martes de la cárcel federal de Brooklyn al Centro Correccional Metropolitano, informó el Chicago Tribune.