Un artista consolidado
Aunque, es sabido que es un artista establecido, él no es de los que se queda dormido en sus laureles, siempre está consolidando “su marca”.
“Ya no tengo que probar nada, simplemente lo que tengo que hacer es inspirar al mundo. Yo estoy inspirando a la gente con mi restaurante, con mis hoteles, con mi marca, con las películas, con todo lo que estoy haciendo, mi meta es inspiración”, señaló.
Agregó: “Ya no es querer probar lo que soy o lo que puedo hacer, y son muy pocos los artistas que pueden decir eso, yo llevo 28 años de carrera”.
“Estoy en un momento bueno de mi carrera, donde puedo estar tranquilo, donde trabajo, porque, obviamente, me gusta, y, gracias a Dios, puedo hacer otras cosas, porque la marca es respetada”, dijo a DL.
Todo lo que ha logrado en su exitosa carrera lo debe a su familia, su resiliencia, constancia y al amor a la música. “Soy un tipo que le tiene mucho temor a Dios y cuando iba a la iglesia, cuando más sentía el espíritu santo era a través de la música”, dijo.
“La música fue la que me dio todo, la que me sacó de la calle”, añadió el artista, con esa pasión también habló de su familia, a quién considera su cable a tierra.
“Son todo para mí, son mi debilidad”, aseveró.
Un boricua muy dominicano
El ama sus dos culturas: se crio en Puerto Rico, pero la cultura dominicana siempre estuvo muy presente en su formación. “Cuando llego a Santiago, mi mamá me hace todo lo que me gusta, Sancocho, mangú, mofongo, arrocito con habichuelas, eso sí, engordo 6 o 7 libras”, dijo. “No puedo decir que he hecho algo por el género, porque sería un hipócrita, pero siempre lo apoyé; de hecho, fui de los primeros que colaboró con El Alfa”, dijo. “Lo único que puedo sentir por la música dominicana es respeto y admiración”, agregó.